Pocas veces la Auditoría General de la Provincia reacciona como los ciudadanos esperan. Cuando por fin lo hace exponiendo la situación en el Municipio de Rosario de la Frontera, el Senado se abate contra ese Organismo.
Por Ernesto Bisceglia
El ciudadano que paga los impuestos para que los funcionarios gocen de abultadas dietas y ninguna preocupación, no comprende cuando de pronto aparece un atisbo de funcionalidad y son los supuestos representantes del Pueblo los que atacan a un Organismo como la Auditoría General de la Provincia cuando su titular expone una situación que tiene ya curso en la Justicia.
La postura del Senado colisiona con lo que debiera ser una conducta transparente orientada a dilucidar si se ha cometido o no delitos en el municipio del sur provincial, donde según la documentación expuesta por el titular de la Auditoría, Mariano San Millán, se comprometería al intendente y sería sustentable como para dar inicio a una investigación formal.
Sin embargo, los senadores cuestionaron duramente a las autoridades de la Auditoría General de la Provincia, donde un senador como Guillermo Durand Cornejo, caracterizado por su oportunismo político y su mediocre actuación, que no puede ostentar más acción social que haber sido defensor de electrodomésticos fallados, se preocupa recién ahora en adelantar que presentará un proyecto de Ley que establezca la modificación en el funcionamiento de la Auditoría General de la Provincia. ¿Y los años anteriores nunca se dio cuenta Durand Cornejo de que esto no caminaba?
En otro pasaje de su alocución, agrega Durand Cornejo que “Me refiero a la obligación que tiene todo funcionario público, que tuviera conocimiento de algún hecho ilícito, de denunciar inmediatamente en sede judicial”, vale decir que en décadas de vivir del Estado, él jamás tuvo conocimiento de ninguna irregularidad.
Otro ignoto para la alta política como el senador del propio Departamento de Rosario de la Frontera, Javier Mónico, no dudó en tildar a San Millán de “inescrupuloso” y “especulador”, echado un manto de sospecha afirmando que “Todo esto me lleva a pensar es que hay una maniobra de disciplinamiento”. ¿Será integrante del Foro de Intendentes también este senador?
Las Instituciones de la República deben estar en un todo para actuar en favor de la claridad de procedimientos y estos episodios de incongruencia que colisionan con una favorable actitud de transparencia, terminan agregando distancia entre el ciudadano y los poderes que debieran defenderlo.
La mujer del César no sólo debe ser honesta, sino también parecerlo, dicen.