Los pilotos pararon porque la empresa estatal ya no les da gratis los pasajes en business. La medida dejo arado a mas de 37 mil pasajeros. Mientras la firma aeronáutica pierde millones dólares, Edgardo Llanos, secretario general de la Asociación del Personal Aeronáutico (APA), viajó a España de vacaciones con su familia, con todos los gastos pagados por Aerolíneas Argentinas.

En medio de una serie de paros que complicaron en repetidas ocasiones los viajes de miles de pasajeros locales y paralizaron las terminales aéreas de todo el país, un viejo beneficio que Aerolíneas Argentinas concede a los pilotos se filtró en medio de una discusión que, en un inicio, era salarial.
APLA, el gremio que nuclea a los pilotos, se queja porque la empresa no confirma en tiempo y forma pasajes en business para sus representados. El sindicato argumenta que es un beneficio concedido años atrás con los que la firma se ahorró aumentos de sueldos, pero la administración de Javier Milei cargó contra esa concesión en una muestra de lo que, considera, son excesivos privilegios de empleados de la empresa estatal.
La empresa confirmó que la asignación de pasajes en clase ejecutiva ha sido suspendida. “Solo los confirmamos en Económica: si al momento de embarcar hay disponibilidad, se les da el pase a ejecutiva”, explicaron. Aunque reconocen que este beneficio está contemplado en el Convenio Colectivo de Trabajo (CCT), afirmaron: “No lo vamos a cumplir hasta que la Justicia nos obligue a hacerlo”.
En cuanto al impacto económico, desde Aerolíneas destacaron que existen 20 millones de dólares en pasajes de clase ejecutiva que son cubiertos por los impuestos de los argentinos. En relación a esto, recordaron que “el año pasado la empresa tuvo pérdidas por 390 millones de dólares”. Para ilustrar el uso de esos beneficios, señalaron un vuelo reciente entre Punta Cana y Ezeiza en el que “10 pilotos y sus familias viajaron en clase ejecutiva”. Según la compañía, este es el conflicto que defienden “la casta aeronáutica de Biró y compañía”, en referencia a Pablo Biró, secretario general de APLA.
El secretario de Transporte, Franco Mogetta, criticó duramente al sindicato en su cuenta de X, destacando que, en el vuelo inaugural de la semana pasada a Punta Cana, “de los 18 asientos en clase ejecutiva, 10 fueron asignados a la casta aeronáutica”. Agregó que “20 millones de dólares al año les cuesta a los argentinos que Biró y sus secuaces vuelen en clase ejecutiva”.
Los pasajes en clase ejecutiva, fueron parte de acuerdos negociados años atrás dentro de la convención colectiva de trabajo (CCT). Según los pilotos, no se trataba de un simple beneficio adicional, sino de una estrategia propuesta por la propia Aerolíneas para evitar incrementos salariales directos, ofreciendo a cambio el acceso a estos pasajes como compensación. Esto permitía a la empresa controlar los costos salariales en lugar de otorgar aumentos monetarios.
Desde el gremio, también argumentan que la discusión actual no se centra en estos pasajes, sino en la recomposición salarial. Argumentan que los salarios de los pilotos han quedado “totalmente depreciados” y que la lucha que están llevando adelante es por una retribución justa y la defensa de los derechos establecidos en el convenio colectivo.