Fateh Sherif era responsable de coordinar las actividades del grupo terrorista con Hezbollah en el país. La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos reconoció que era empleado de la organización.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y el servicio de seguridad interna Shin Bet confirmaron el lunes en un comunicado conjunto que un alto comandante de Hamas en el Líbano murió en un ataque aéreo nocturno, en medio de la creciente tensión en la región.
Fateh Sherif, descrito por las autoridades israelíes como “jefe de la rama libanesa de la organización terrorista Hamas”, fue abatido en una operación que tuvo como objetivo su residencia en el campo de refugiados de Al-Bass, cerca de la ciudad sureña de Tiro, según informaron fuentes oficiales libanesas.
El comunicado militar israelí detalla que Sherif era responsable de coordinar las actividades de Hamas en el Líbano con Hezbollah, así como de los esfuerzos para fortalecer la presencia del grupo en el país, incluyendo el reclutamiento de operativos y la adquisición de armamento. “Trabajó para promover los intereses de Hamas en [Líbano], tanto política como militarmente”, señala la declaración.
Por su parte, Hamas confirmó la muerte de Sherif en un comunicado, identificándolo como “Fatah Sharif Abu al-Amine, dirigente de Hamas en Líbano y miembro de la dirección del movimiento en el extranjero”. Esta pérdida representa un duro golpe para la estructura de mando de Hamas fuera de Gaza, donde la organización ha estado construyendo una red de apoyo y operaciones.
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA) reconoció que Sherif era empleado de la organización, pero afirmó que estaba siendo investigado por sus actividades políticas. Esta revelación plantea interrogantes sobre la posible infiltración de elementos de Hamas en organizaciones humanitarias internacionales, un tema que ha sido motivo de preocupación y debate en el pasado.
El suceso se produce mientras Israel continúa golpeando las organizaciones terroristas que amenazan su seguridad en el Líbano. En un suceso separado pero relacionado, el Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) anunció la muerte de tres de sus líderes en un ataque israelí en el distrito Cola de Beirut durante la madrugada del lunes.
Las víctimas del FPLP fueron identificadas como Muhammad Abdul Aal, miembro del buró político del Frente y jefe del departamento de seguridad militar; Imad Awda, miembro del departamento militar del Frente y su comandante militar en el Líbano; y el líder Abdul Rahman Abdul Aal. En un comunicado, el FPLP prometió “continuar el camino de la lucha y la resistencia hasta que la ocupación sea barrida, sin importar cuánto tiempo tome y sin importar cuán grande sea la guerra”.
Mientras tanto, Hezbollah, aliado clave de Hamas en el Líbano, se encuentra en proceso de seleccionar un nuevo líder tras la muerte de Hassan Nasrallah, según declaró Naim Qassem, el número dos del grupo, en un discurso televisado.
Qassem advirtió que Hezbollah está “listo” para una posible ofensiva terrestre israelí en territorio libanés y prometió continuar su lucha contra Israel “en apoyo a Gaza”.
“Estamos listos si los israelíes deciden entrar en nuestro territorio, nuestras fuerzas de la resistencia están listas para una confrontación terrestre”, aseguró Qasem en su discurso, retransmitido en directo en la cadena de Hezbollah, Al Manar. Además seguró que Israel “no ha sido capaz” de destruir sus capacidades militares pese a la campaña de bombardeos masiva iniciada hace una semana.
Qassem también proporcionó detalles sobre la muerte de Nasrallah, afirmando que falleció el viernes en un bombardeo israelí en los suburbios del sur de Beirut junto a Ali Karaki, comandante del frente con Israel en el sur de Líbano; el general Abas Nilforushan, de los Guardianes de la Revolución de Irán; y otros dos miembros de Hezbollah. Esta información contradice las afirmaciones iniciales de Israel, que había dicho que Nasrallah murió junto a una veintena de miembros de la formación.
La situación en la frontera entre Israel y Líbano permanece extremadamente tensa, con intercambios de fuego frecuentes entre las FDI y Hezbollah desde el inicio del conflicto en Gaza el 7 de octubre. Analistas temen que estos incidentes puedan escalar a un conflicto más amplio en la región, potencialmente involucrando a otros actores regionales como Irán.
Mientras tanto, la población civil en ambos lados de la frontera israelo-libanesa vive bajo la constante amenaza de ataques con cohetes y represalias aéreas, con muchos residentes desplazados o buscando refugio en áreas más seguras. La situación humanitaria, ya crítica en Gaza, amenaza con deteriorarse también en el sur del Líbano si el conflicto continúa intensificándose.