La ministra de seguridad, Sabina Frederic expresó que cree que esta es la oportunidad para transparentar el uso de esta herramienta” y agregó que llevará su discusión a la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputados.
Tras la polémica por el ciberpatrullaje realizado por las fuerzas de seguridad, la ministra de Seguridad, Sabina Frederic, decidió que se elabore un protocolo para este tipo de actividades, pero aclaró que está vigente desde la gestión de su antecesora en el cargo, Patricia Bullrich. En el ministerio señalaron que, dado que la revisión se hace con posteos públicos, este tipo de patrullaje no está regulado, y que consideran necesario que se definan sus límites y utilización.“Creo que es la oportunidad para transparentar el uso de esta herramienta”, dijo Frederic, y agregó que llevará su discusión a la Comisión de Seguridad de la Cámara de Diputados.
El reconocimiento que hizo la ministra, al informar en una teleconferencia con Diputados, de que las fuerzas de seguridad tienen programas de entrecruzamiento de datos con los que revisan las publicaciones de las redes, encendió alarmas.
En la cartera de Seguridad, a raíz de las críticas, marcan que hay una diferencia entre ciberpatrullaje y “ciberespionaje”. Aseguran que no se están realizando tareas intrusivas, ni invasivas, sino que analizando contenidos que son públicos con fines preventivos. En este caso, para detectar por ejemplo si hay muchas denuncias en las redes sociales de incumplimiento de la cuarentena en un distrito.
“Me parece que la frase de medir el humor social no fue la mejor frase y dio lugar a interpretaciones que son lógicas”, declaró Frederic en una serie de entrevistas radiales.
Agregó que esos monitoreos se realizan en las redes sociales “sobre lo público” y “no sobre las personas”. “El objetivo de hacer una supervisión del espacio público digital es identificar la posible comisión de delitos y, en el caso de que lo identifiquemos, darle intervención a la Justicia”.
“Para estas circunstancias nos parece una herramienta, entre muchas otras, para poder anticiparnos a posibles delitos, saqueos, salideras bancarias y eso. En ningún caso, porque es ilegal, nosotros hacemos indagación sobre personas”. En relación a en qué consiste concretamente el ciberpatrullaje, la ministra dijo que «es una investigación, un rastrillaje sobre lo que es público. Se miran las redes, se cruzan palabras, hashtags, es lo que hace muchas veces el periodismo para buscar tendencias, solo que está pensado con el objetivo de evitar delitos».
Sobre cuáles son los conflictos a los que el gobierno busca adelantarse, Frederic mencionó el «temor a saqueos,en el Gobierno y también en los comerciantes. Estamos tratando de identificar si es posible que ocurra, hasta ahora no hemos tenido ninguna alerta de este tipo y al hacer seguimiento de las palabras después confirmamos que son falsas».
Vinculado de manera estrecha a este tema está el de los casos de abusos policiales en la cuarentena. Desde que se restringió la circulación en la calle han habido numerosas denuncias de violencia policial contra personas que no cumplían la cuarentena. En el ministerio no ocultan que hay preocupación por estos hechos. Tienen 22 efectivos bajo investigación por diez denuncias, y tres efectivos expulsados. Se trata de los gendarmes que obligaron a hacer ejercicio en la calle, verdugueándolos, a un grupo de jóvenes que no respetaron el confinamiento. Este tipo de conductas abusivas vienen siendo observadas tanto las fuerzas federales como en los efectivos de las policías provinciales. Los casos denunciados en Chubut son los más repetidos y de mayor gravedad.
A partir de esto casos, la instrucción dada a las fuerzas de seguridad fue que interpretaran en sentido amplio los permisos de circulación, evitaran la concentración en la comisarías de detenidos por violar el DNU e informar de inmediato a la justicia sobre cualquier arresto.
Fuente: Página 12